Puigdemont sitúa a Rull como número tres el 12-M y ficha a Ennatu Domingo y Agustí Colomines

BarcelonaEl expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ya ha dejado atrás a Bélgica y, en concreto, a Waterloo para instalarse en la Catalunya Nord, en la comarca del Vallespir. Su idea es afrontar la campaña electoral de las elecciones del 12 de mayo desde allí y preparar así su regreso tras los comicios, según fuentes de Junts. La idea del expresidente, como dijo a la conferencia de Elna el pasado 21 de marzo, es volver a Catalunya si tiene una mayoría para ser investido presidente de la Generalitat, aunque desde el partido consideran que igualmente ya ha empezado a cerrar la etapa del exilio, sea cual sea el resultado de las elecciones, gracias a la futura aprobación de la ley de amnistía a finales de mayo. La norma, si la aplican los tribunales, permitirá a los exiliados volver a pisar territorio español.

“Hoy comienza la cuenta atrás de la vuelta”, anunció Puigdemont a Elna y, de hecho, pocos días después ya inició el traslado al Vallespir para instalarse en Semana Santa: está a menos de una hora de su casa, ya que la comarca francesa, con capital en Ceret, hace frontera con el Principado y delimita con el Alt Empordà, la Garrotxa y el Ripollès. Sin embargo, este enclave no sólo es una decisión personal –Puigdemont se cambia de casa–, sino sobre todo una decisión política: desde la Catalunya Nord es desde donde el expresidente y Junts harán buena parte de la campaña electoral.

De esta manera, se desmarcan de lo que hicieron por las elecciones catalanas del 2017, en las que el principal mensaje también giraba en torno al “retorno del presidente” –Puigdemont acababa de ser destituido por el 155 y se presentó de cabeza de lista–, pero la mayoría de actos estuvieron en Catalunya ya través de una pantalla. Esta vez, Junts quiere hacer una campaña presencial, con el candidato, para transmitir la idea de que volver al Principado sí es posible por la amnistía. Por este motivo, la mayoría de actos estarán en la Catalunya Nord: este mismo sábado Puigdemont regresa a Elna por su candidatura, que ha elaborado él en primera persona después de haber decidido dar un paso adelante por las elecciones catalanas.

Los nombres de la lista

Este viernes la permanente y la ejecutiva de Junts se han reunido para ratificar los nombres, después de un encuentro el jueves entre el expresidente, el secretario general de Junts, Jordi Turull, y la presidenta del partido, Laura Borràs. Tal y como ha avanzado el ARA, más allá de Puigdemont, el hombre fuerte de la candidatura será el exconseller Josep Rull, al que ha situado como número 3, por detrás del fichaje de la empresaria del campo de las nuevas tecnologías Anna Navarro.

De esta manera, el extitular de Territorio durante el gobierno del 1-O vuelve a la primera línea política después de haber estado en prisión. Se convierte en la primera espada del partido por detrás de Puigdemont y, de hecho, era uno de los candidatos que se perfilaban como alternativa al expresidente si éste no se presentaba a la Generalitat. Sin embargo, ahora los junteros aseguran que no hay plan B en Puigdemont. Rull será el único expreso político que concurrirá a las elecciones del 12-M, ya que, a diferencia de Turull o del presidente de ERC, Oriol Junqueras, ya no está inhabilitado. El ex conseller de Territori sólo fue condenado por sedición, un delito que decayó con la última reforma del Código Penal pactada entre Esquerra y el PSOE.

La otra primera espada que acompañará a Puigdemont a la candidatura será la presidenta del Parlament, Anna Erra. También estará el entorno más cercano del expresidente: el hasta ahora presidente del grupo parlamentario, Albert Batet, que es la primera vez que irá a la lista de Barcelona, ​​como número 5, y que no encabezará la de Tarragona, y también el vicepresidente del partido y portavoz, Josep Rius, que será el séptimo. Como número 8 Puigdemont sitúa a Judith Toronjo, que entró la pasada legislatura como representante de la JNC, y también incluye al sector más pragmático con el exconseller Jaume Giró como número 11 de la lista. Será la primera vez que Giró entrará como diputado –la pasada legislatura Junts le fichó como independiente para el Govern– y, como Rull, también tenía aspiraciones a ser candidato a la Generalitat: ahora bien, lo aparcó ante el paso de Puigdemont. Como número 13 estará el exconseller en el exilio Lluís Puig y como número 16 el líder de Demócratas, Toni Castellà, con quien Junts hace coalición.

Los demás fichajes

En cuanto a los fichajes, Puigdemont ha optado por otra independiente en el número 6: la escritora de origen etíope Ennatu Domingo. Y, para el número 9, recupera al historiador Agustí Colomines. El perfil ideológico de éstos –más a la izquierda– contrasta con el de Navarro, del sector más liberal. Colomines no milita en Junts, pero siempre ha estado en la órbita de las iniciativas de Puigdemont: se implicó en la fundación del Llamamiento Nacional por la República y también dirigió el think tank del Consejo por la República, aunque dimitió al poco tiempo. Previamente, había estado vinculado a CDC, puesto que dirigió la fundación CatDem en la época de Artur Mas.

¿Y cómo queda el equilibrio interno de Junts? El borrasismo pierde peso. Caen la mayoría de sus afines de esta legislatura: queda fuera Aurora Madaula, secretaria segunda de la mesa del Parlament y que había denunciado al grupo en el Parlamento por presunto acoso por razón de género, y también Ester Vallès. Su mano derecha, Francesc de Dalmases, irá de número 18 por Barcelona, ​​por lo que sólo entraría en el Parlament si Junts mejora resultados: en las anteriores elecciones, de los 32 escaños 16 eran de la provincia barcelonesa. Sin embargo, el entorno de la presidenta del partido asegura estar satisfecha, sobre todo con la incorporación de Domingo y Navarro, que considera cercanas a ella.