Junqueras sale con ventaja: quien es quien de la recta final para presidir ERC
Este sábado comienza la campaña por el congreso del 30 de noviembre en un partido en plena crisis
BarcelonaLa guerra por liderar ERC entra en su fase final. Este sábado comienza oficialmente la campaña electoral de cara al congreso del 30 de noviembre, los quince días decisivos para las tres candidaturas que han logrado pasar el filtro de los avales (el mínimo era un 5% del censo, en torno a 412 firmas). Militancia Decidim, la lista que lidera Oriol Junqueras, es la que ha presentado más firmas, 2.577; Nueva Izquierda Nacional, el proyecto que encabeza Xavier Godàs y al que apoya Marta Rovira, ha entregado 1.500, mientras que Foc Nou, cuya candidata es Helena Solà, ha recogido alrededor de 500 avales –el partido dará a conocer la cifra exacta este sábado–. En las últimas semanas las candidaturas han recorrido el territorio para explicar su proyecto y han intentado exhibir los apoyos que han ido reclutando. ¿De quién se ha rodeado Oriol Junqueras? ¿Marta Rovira se ha implicado en la campaña de Xavier Godàs? ¿Cuál es la carta de presentación de Foc Nou?
Desde que se convocó el congreso, en mayo, el dilema que ha enfrentado principalmente el partido es si era necesaria una renovación de liderazgos o no. La candidatura de Oriol Junqueras es la única que defiende que el hasta hace pocos meses líder del partido se presente a la reelección, mientras que el resto de candidaturas apuestan por un cambio cara al frente del partido, cada uno con sus matices. Para defender su tesis, cada candidatura se sostendrá en figuras de mayor o menor peso.
Oriol Junqueras ha situado en lo más alto de su propuesta de ejecutiva cuatro nombres: Elisenda Alamany, portavoz del grupo municipal de ERC en Barcelona; Diana Riba, eurodiputada; Arés Tubau, exconcejala de Rubí, y Oriol López, ex concejal de Mollet y hasta ahora vicesecretario general de coordinación interna de Esquerra. A su lado también hay otras figuras que apuntalan y pelotan su proyecto como el expresidente del Port de Barcelona, Lluís Salvadó.
El "pomo de arriba" de Nueva Izquierda Nacional, aparte de Xavier Godàs como candidato a presidente, lo forman la exdiputada Alba Camps; la actual vicepresidenta del Parlament, Raquel Sans, y la diputada en el Congreso Teresa Jordà. La candidatura también ha recibido el apoyo explícito de la secretaria general del partido, Marta Rovira, y del expresidente Pere Aragonès –participaron en el acto del 19 de octubre en Barcelona–, además de buena parte de los exconsejeros del Govern, como Laura Vilagrà, Anna Simó, David Mascort, Manel Balcells o Meritxell Serret (que también forma parte de la candidatura). Durante los próximos días, tanto Rovira como algunos ex consejeros también participarán en los encuentros con la militancia que ha preparado la candidatura.
A Helena Solà, la candidata de Foc Nou, le acompañan el exconseller Alfred Bosch, impulsor de la candidatura; el concejal en Sabadell Gabriel Fernández; el ex diputado Jordi Orobitg, y la concejala en Matadepera Anna Piñol. Se trata de una tercera vía en la que su valor, defienden, pasa por un cambio profundo: subrayan que de los miembros que presentan para formar parte de la ejecutiva de ERC, ninguno de ellos haya formado parte , a diferencia de las otras dos listas. De la propuesta de ejecutiva de treinta personas que han presentado Militancia Decidim y Nova Esquerra Nacional, en la primera candidatura hay diez personas que están en la actual dirección, mientras que en el segundo caso, hay siete.
Apoyos al Parlamento, Congreso, Senado y Eurocámara
¿Cómo se reparten los apoyos al Parlamento, al Congreso, al Senado ya la Eurocámara? En la cámara catalana, Junqueras está en minoría: de los veinte diputados, siete se han puesto a su lado, mientras que hay al menos nueve que apoyan a Nueva Izquierda Nacional. También hay cuatro que han adoptado un papel neutral o que no han querido posicionarse públicamente: Carles Campuzano –que no es militante de ERC–, Najat Driouech, Mar Besses –la parlamentaria que representa al Jovent Republicà– y Jordi Viñas. De los siete que apuestan por Junqueras están los exconsejeros Joan Ignasi Elena y Ester Capella, o el portavoz adjunto Jordi Albert y el secretario de la mesa Juli Fernàndez. Se suman Ana Balsera, Albert Salvadó y Josep Vidal. Capella es uno de los soportes nuevos que ha recibido Junqueras, porque ella había sido uno de los nombres que firmó el manifiesto que pedía una renovación de la cúpula del partido. En cambio, el presidente del grupo parlamentario, Josep Maria Jové, y las portavoces Marta Vilalta y Laura Vilagrà están junto a Xavier Godàs, además de Irene Aragonès, Montse Bergés, Laia Cañigueral, Tania Verge, Raquel Sans y Ruben Wagensberg – ambos últimos forman parte de la candidatura–.
En el Congreso la situación está a la inversa. Junqueras cuenta con el apoyo de cuatro de los siete diputados, entre ellos el portavoz, Gabriel Rufián, además de Jordi Salvador, Inés Granollers y Etna Estrems. Teresa Jordà, la número dos del grupo, es una de las caras visibles de Nova Esquerra Nacional, candidatura a la que también apoya la diputada Pilar Vallugera. Francisco Marco Álvaro no es militante de ERC y ha adoptado un papel neutral. En el Senado el escenario es de empate: de los cuatro senadores, dos apuestan por Junqueras –Laura Castel y Jordi Gaseni–, y dos por Godàs –Sara Bailac y Joan Queralt–. En la Eurocámara, la única diputada de los republicanos es Diana Riba, que forma parte de la candidatura de Junqueras. Foc Nou no tiene ningún representante en estas cámaras que les dé un apoyo explícito, pero utilizan precisamente este hecho para presentarse como la candidatura del "cambio".
Mundo municipal y dirigentes históricos
Todas las candidaturas han querido jugar la carta municipalista para defender que sus proyectos beben de esa experiencia. Junqueras tiene al lado a alcaldes como el de San Andrés de la Barca, Marc Giribet; el de Amposta, Adam Tomàs, o el hasta hace pocas semanas alcalde de Sant Julià de Ramis, Marc Puigtió; pero también reclutó el apoyo de Patrícia Gomà, la persona que se enfrentó a Eva Baró –próxima a Junqueras– en Barcelona hace un año para liderar la federación. En ese momento, Gomà es quien hizo el primer pulso al junquerismo. En el territorio, Nueva Izquierda Nacional ha recibido el apoyo de varios cargos electos como el alcalde de Manresa, Marc Aloy, el mayor municipio donde gobiernan los republicanos; Carme Ferrer, alcaldesa de Senan (Priorat), o el alcalde de Martorelles, Marc Candela. Foc Nou también exhibe apoyo municipalista y destaca que el grupo del consistorio de Tarragona les avala casi en bloque –forman parte de la lista de concejales como Xavi Puig–. La candidatura de Helena Solà ha recibido el apoyo también del exalcalde de Lleida Miquel Pueyo y del ex diputado Miquel Àngel Estradé.
¿De qué lado se ha puesto la vieja guardia del partido? Nueva Izquierda Nacional es quien tiene el apoyo de buena parte de dirigentes históricos. Lo han explicitado Juan Puigcercós, Ernest Benach, Juan Ridao, Javier Vendrell, Juan Manuel Tresserras o Marina Llansana; mientras que Junqueras ha hecho valer el aval del exdiputado Joan Tardà y también le apoya el exconseller de Exteriores Bernat Solé. Entre los represaliados que estuvieron en prisión, también se han repartido los apoyos: Carme Forcadell y Dolors Bassa se han puesto junto a Nova Esquerra Nacional (aunque Bassa firmó el aval por Foc Nou) y Raül Romeva está con Junqueras.
Con los apoyos repartidos, ahora la última palabra la tendrán los más de 8.000 militantes que podrán votar el 30 de noviembre. A lo largo de estas dos semanas de campaña, podrán ver cómo los candidatos a la presidencia y secretaría general del partido confrontan sus propuestas en dos debates. El 24 de noviembre lo harán los que se proponen como secretarios generales –se enfrentarán Elisenda Alamany, Alba Camps y Alfred Bosch–, mientras que los candidatos a la presidencia –Oriol Junqueras, Xavier Godàs y Helena Solà– se sentarán juntos en la sede de la calle Calàbria el 26 de noviembre.
Después de meses de guerra interna, en los que se ha certificado el divorcio del tándem entre Oriol Junqueras y Marta Rovira y la batalla se ha agravado a raíz del escándalo de los carteles contra los Maragall, la militancia deberá decidir quién quiere que pilote el partido a partir del 1 de diciembre. Esto siempre que la candidatura ganadora supere el 50% de los votos, porque si no llega, la votación deberá repetirse en una segunda vuelta en la que la militancia deberá elegir entre las dos listas más votadas –Xavier Godàs abrió la puerta esta semana a aliarse con Foc Nou para derrotar a Junqueras–. Sea como fuere, a quien le recaiga la responsabilidad de pilotar Esquerra se encontrará un partido totalmente dividido que deberá recosir si pretende hacerlo reflotar después de cuatro batacazos electorales seguidas y una guerra interna que ha sido de las más cruentas de la historia de la formación.