Algunos científicos del IPCC desconfían de los gobiernos
En una encuesta, el 60% dicen que la Tierra se calentará más de 3 ºC
Una de las dificultades principales -técnicas, no políticas- a la hora de gestionar la emergencia climática es que la situación es endemoniadamente compleja y es difícil construir recomendaciones precisas y fáciles de aplicar. Se tiene que ir más en transporte público, de acuerdo, ¿pero cuánto más? Se tiene que consumir menos energía, sí, ¿pero cuánta menos? El acuerdo logrado en París en 2015 estableció el objetivo concreto de limitar el calentamiento del planeta en 2100 a un incremento de entre 1,5 y 2 grados centígrados respecto a la época preindustrial. El problema es que el mundo no tiene un termostato con una rueda que se pueda girar para bajar la temperatura. El termostato del planeta, de hecho, está formado por casi ocho mil millones de ruedas. Algunas no se pueden mover -hay muchas personas en el mundo que lo tienen muy difícil para cambiar de estilo de vida-, y las que se podrían mover mucho -empresas y políticos- se mueven poco, por razones suficientemente conocidas.
Para superar esta dificultad, los esfuerzos se han centrado en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Pero esta reducción sigue estando lejos de las acciones concretas que pueden hacer las personas y depende en gran medida de las decisiones políticas, que de momento han sido insuficientes. En la COP26 que se celebra estos días en Glasgow, el director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía (IEA), Fatih Birol, ha asegurado que si se cumplieran todos los compromisos anunciados el aumento de temperatura se estancaría en los 1,8 ºC en 2100, lo que, dadas las circunstancias, sería todo un éxito.
Científicos escépticos con los gobiernos
Hay científicos que lo ven de una forma parecida, pero otros no confían en que se cumplan los acuerdos. En este sentido, la revista Nature acaba de publicar los resultados de una encuesta anónima hecha a los científicos del Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC, según las siglas inglesas). Los resultados de la encuesta y las reflexiones que los acompañan ilustran a la perfección la gravedad de la crisis climática que vive la humanidad.
La encuesta se propuso a 233 investigadores, pero la han respondido 92. Uno de los resultados más significativos es el obtenido en respuesta a la pregunta de cuál pensaban que sería el grado de calentamiento más probable del planeta en 2100. El 60% de los que han contestado se han inclinado por un aumento igual o superior a 3 ºC. Esta cifra supera algunas de las predicciones que se han publicado recientemente, porque contiene implícitamente la carencia de confianza de estos científicos en los gobiernos. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio ambiente publicó un informe a finales de octubre según el cual el calentamiento llegaría a los 2,7 ºC en 2100 si se cumplieran todos los compromisos adquiridos hasta ahora. Por otro lado, el Climate Action Tracker (CAT), un consorcio internacional de instituciones científicas, estima que si se cumplieran los Acuerdos de París, este aumento de temperatura sería de 2,4 ºC.
Por otro lado, el 88% de los encuestados están convencidos que el calentamiento global constituye una crisis y casi el mismo porcentaje esperan ver impactos catastróficos como consecuencia del cambio del clima durante su vida. Cerca de la mitad explican que el calentamiento global los ha llevado a reconsiderar decisiones vitales como la de tener hijos o la de elegir el lugar donde vivir. Y más del 60% admiten que la situación les provoca ansiedad, dolor y otras formas de estrés.
La encuesta tiene limitaciones evidentes. Hay muchos científicos que no han participado, y todos los que lo han hecho han respondido a título individual y no en nombre del IPCC. Algunos de los participantes incluso han expresado a Nature la preocupación que las preguntas se centren en las opiniones de los científicos y no estrictamente en su ciencia. Y, como en casi todas las encuestas, admite interpretaciones negativas y positivas. Las negativas ya han salido, pero en el lado de las positivas destaca el hecho que más del 20% de los encuestados confían en que se podrá mantener el calentamiento alrededor de los 2 ºC y un 4% incluso ven posible reducirlo a los 1,5 ºC.
Ahora bien, tal como indican la gran mayoría de datos y modelos climáticos, para conseguir este reto es imprescindible que en la COP26 de Glasgow se logren acuerdos más ambiciosos que los actuales y que después, claro, se cumplan.
