Un corpinnat de Gramona recibe el premio al mejor espumoso biodinámico del mundo

El jueves tuvo lugar en Londres la celebración de los Champagne & Sparkling Wine World Championships (CSWWC), en los que un espumoso catalán recibió tres prestigiosas distinciones. En concreto fue el Gramona Imperial Magnum 2017, que fue reconocido como mejor Corpinnat, mejor espumoso de España y mejor espumoso biodinámico del mundo. Se da el caso de que la añada de 2017 es la primera cien por cien biodinámica de este espumoso icónico.

El concurso es un certamen muy prestigioso y selectivo que cuenta con un jurado experto y muy exigente que prueba a ciegas más de 1.000 espumosos en varias fases antes de emitir su veredicto. Este jurado formado por tres personas de amplia trayectoria y reconocidas por el sector está compuesto por Tom Stevenson, que fue el primer periodista vinícola especializado en espumosos y que en 1998 fue el responsable de la primera edición de la Christie's World Encyclopedia of Champagne and Sparkling Wine, considerada la mejor guía mundial de vinos espumosos; Essi Avellan, primera Master of Wine finlandesa, autora de una tesis sobre champagnes de viñedos singulares y cofundadora y editora de la revista Fine Champagne; y, por último, George Markus, el segundo mejor catador mundial de espumosos después de Essi Avellan.

El premio a una trayectoria

El reconocimiento a este vino va más allá de una botella concreta o una añada concreta, es una suma de factores empujados por una filosofía que lleva años imperando en Gramona: la viticultura consciente. Es, por tanto, también el premio a una trayectoria. Gramona Imperial 2017 es la primera añada con certificación Demeter de todos los viñedos que producen las cuatro variedades de uva (xarel·lo, macabeo, parellada y chardonnay) que conforman este Corpinnado y que se vinifican por separado para sacar el máximo rendimiento. El Gramona Imperial es un espumoso icónico de la bodega porque ya lo empezó a elaborar la tercera generación de la familia, siendo la sexta generación, en este caso Leonard Gramona, quien recogió el galardón el jueves en Londres.

El reconocimiento llega después de unos meses difíciles para la bodega después de la inesperada muerte de Xavier Gramona en agosto, un hombre respetado y carismático, y una figura clave para la creación de Corpinnat conjuntamente con su primo Jaume Gramona. Tras este desgraciado accidente, la sexta generación, Leo y Roc Gramona, han dado un paso adelante impulsando el legado de una bodega que recoge los frutos del trabajo bien hecho y que tiene muy bien apuntalado el futuro.