Un fresco de Dionisio reaparece 2.000 años después en Pompeya
Las excavaciones en la ciudad sepultada por el Vesubio revelan una gran pintura del dios del vino con un séquito de bailarinas, cazadoras y sátiros

BarcelonaCerca de dos mil años después de la explosión del Vesubio, Dionís vuelve a exhibir su arrebato y bonhomía en Pompeya. El dios del vino, las fiestas y las orgías ha reaparecido en la ciudad romana gracias a las excavaciones del yacimiento arqueológico, que han revelado un gran friso datado entre el año 40 y el 30 antes de Cristo que representa a Dionisio con su séquito habitual de bailarinas, cazadoras y sátiros.
La obra en cuestión es una pintura de escalera casi humana que se ha recuperado en la pared de un salón para banquetes que se ha excavado en las últimas semanas. La estancia ha sido bautizada por los arqueólogos como Casa del Tíasos, que era como se conocía a la comitiva de seguidores embriagados que acompañaban a Dionisio en sus bacanales y orgías nocturnas. El séquito del fresco incluye una cabra degollada, una mujer que se inicia en el ritual y jóvenes sátiros que tocan la flauta o hacen la libación del vino en honor al dios.
La pintura quedó sepultada en el año 70 a raíz de violenta explosión volcánica del Vesubio que sepultó la próspera ciudad romana. No es el primer fresco que revelan las excavaciones arqueológicas en Pompeya, pero destaca por su importante tamaño: es el segundo más grande junto con otro mural gigante o megalografía que se descubrió durante las excavaciones de la conocida como Casa de los Misterios.
A través de la pintura de la Casa de Tíasos, los arqueólogos pueden estudiar los rituales iniciáticos del culto dionisíaco y la importancia que tenía la caza, representada en la figura de las cazadoras y también presente en un pequeño fresco en la parte superior del mural que representa animales vivos y muertos. Las redadas de caza de los seguidores de Dionisio, ya relatadas por Eurípides en la tragedia Las bacantes (406 antes de Cristo), eran metáforas de una vida desenfrenada, asegura el director del yacimiento de Pompeya, Gabriel Zuchriel.
El ministro de Cultura italiano, Alessandro Giuli, ha celebrado este "documento histórico excepcional" porque revela "un aspecto de la vida en la época clásica mediterránea que era en gran parte desconocido". El gobierno italiano, aseguró Giuli, seguirá financiando las excavaciones del yacimiento de Pompeya, que el pasado año recibió cuatro millones de visitantes.