Un robot para buscar supervivientes: el origen de la 'roomba' que aspira tu casa
La compañía iRobot nació con el lanzamiento de autómatas para la exploración espacial y la defensa

El 11 de septiembre del 2001, pocos minutos después de que ambos aviones se estrellaran en las Torres Gemelas de Nueva York, las puertas del almacén de la Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados de Defensa (DARPA) de Estados Unidos se abrieron. Salieron varias furgonetas. En el interior, viajaban los PackBot, unos robots todoterreno pensados para ayudar a los equipos de rescate a encontrar supervivientes entre los escombros. Aún estaban en fase de desarrollo, pero, ese día, los científicos decidieron ponerlos a prueba. Eran muy pequeños y compactos, se movían a una velocidad de diez kilómetros por hora, podían aguantar todo tipo de condiciones meteorológicas e iban equipados con un sistema de radio, cámaras y sensores para interactuar con el entorno. Les coronaba un brazo articulado muy versátil que podía retirar pequeños obstáculos, explorar espacios estrechos o colocar objetos en lugares de difícil acceso. Detrás del widget estaba iRobot, la compañía que, 25 años después, triunfa vendiendo robots que aspiran ellos solos casas de todo el mundo.
En el origen de la empresa se encuentran Rodney Brooks, Helen Greiner y Colin Angle, tres científicos que se habían hecho amigos en los laboratorios de inteligencia artificial del prestigioso Massachusetts Institute of Technology (MIT). En 1990 decidieron fundar iRobot. Al año, presentaron Genghis, un robot diseñado para la exploración espacial. En 1996 lanzaron Ariel, un cangrejo robotizado capaz de detectar y eliminar minas en el mar, en zonas donde se practica el surf. En 1998 estrenaron el primer PackBot, que intervino en los atentados del World Trade Center. También se desplegó en Afganistán y se utilizó en la catástrofe nuclear de Fukushima. Fue en el 2002 cuando iRobot decidió añadir al sector civil a su catálogo. Lo hizo con la primera Roomba, el robot aspirador para el hogar. Sólo dos años después ya había vendido un millón de unidades, principalmente en Estados Unidos. Un año más tarde la compañía salió a bolsa, en el Nasdaq.
Robots para limpiarlo todo
Viendo el éxito de su primer modelo, iRobot centró sus esfuerzos en la rama de los robots domésticos. En 2005 estrenó Scooba, un modelo para fregar suelos; en 2006, Dirt Dog, por aspirar tierras más rugosos; en 2007, Looj y Verro, para limpiar canales de tejados y piscinas, respectivamente. Los modelos fueron evolucionando hasta el 2013. Ese año la empresa ya había vendido 10 millones de robots domésticos y más de 5.000 del sector de defensa y seguridad. Para reforzar su liderazgo desembolsó 74 millones de dólares para quedarse con la empresa californiana Evolution Robotics, especializada en visión por computador y que había estrenado Mint, una mopa robotizada similar a los productos de iRobot. En febrero de 2016, justo cuando la compañía anunció que había colocado 20 millones de aparatos en las casas de todo el mundo, vendió la rama militar del negocio a Arlington Capital Partners.
En noviembre de 2021 iRobot sacó el talonario para comprar Aeris Cleantec, una empresa especializada en purificadores de aire y estrenó sus propios aparatos al año. Uno de los episodios más sonados de la compañía llegó recientemente. El 5 de agosto de 2022 Amazon anunció su intención de comprar iRobot por 1.700 millones de dólares. Sin embargo, la Comisión Federal de Comercio estadounidense no lo vio claro: sufría por el dominio de Amazon y la privacidad de los datos de los usuarios, especialmente en el caso de los planos de los hogares. En enero del 2024 Amazon e iRobot dieron marcha atrás, tras chocar, también, con la oposición de los reguladores antimonopolio de la Unión Europea.
Hoy, la compañía factura 891 millones de dólares anuales. "Como fueron los primeros en llegar al mercado, tuvieron tiempo suficiente para posicionarse bien en la mente de los consumidores", analiza Neus Soler, experta en marketing de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). "Han logrado el mayor éxito que se puede tener en el campo del branding: que el nombre de su marca se utilice como nombre genérico, a la hora de referirse a los robots aspiradores, sean de la marca que sean", acaba.