BarcelonaRara vez un anuncio desencadena una ola de rechazo internacional unánime, desde las potencias europeas, hasta Rusia o China, pasando por los países árabes y los partidos palestinos. El "plan" de Donald Trump de convertir a Gaza en un centro de vacaciones en el Mediterráneo sin palestinos lo ha logrado. "Ilegal", "absurdo" o "inaceptable" han respondido a la ONU, Londres, Berlín, Riad, Moscú o Pekín, así como Hamás y la Autoridad Palestina. Dentro de Estados Unidos, voces demócratas se han despachado tachando la idea de Trump de "broma de mal gusto".
Horas después del anuncio, algunos miembros del gabinete de Trump recogían cable e intentaban echar atrás la propuesta del mandatario. El presidente no explicó cómo pretende tomar el control de Gaza y en el aire flotaba la cuestión de si esto sería sinónimo de enviar tropas estadounidenses a la región para poder conseguirlo. "El presidente no se comprometió a desplegar tropas en Gaza", decía la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, durante la rueda de prensa del día. No especificó cómo Estados Unidos podría tomar el control de Gaza sin fuerza militar, aunque dijo que Trump tiene previsto reunirse con otros líderes de la región para discutir los siguientes pasos.
El territori de la Franja de Gaza
Té una superfície total de 360 km2
Corredors sota control israelià
Passos fronterers (actualment tancats)
mar Mediterrània
(40 km de costa amb Gaza)
ISRAEL
(51 km de frontera
amb Gaza)
EGIPTE
(14 km de frontera
amb Gaza)
Corredors sota control israelià
Passos fronterers (actualment tancats)
ISRAEL
(51 km de frontera
amb Gaza)
mar Mediterrània
(40 km de costa amb Gaza)
EGIPTE
(14 km de frontera
amb Gaza)
Corredors sota control israelià
Passos fronterers (actualment tancats)
ISRAEL
(51 km de frontera
amb Gaza)
mar Mediterrània
(40 km de costa amb Gaza)
EGIPTE
(14 km de frontera
amb Gaza)
El presidente estadounidense ha anunciado su "plan" esta madrugada ante el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el primer mandatario extranjero que recibe en la Casa Blanca en su segundo mandato. Ha dicho que "Estados Unidos tomará el control de Gaza" y se "apropiará" y ha insistido en que los palestinos deben ser ahuyentados de Gaza, y que estarán satisfechos de hacerlo: "Pueden ocupar toda una hermosa área con casas y seguridad, y pueden vivir sus vidas en paz y armonía". El presidente afirmó que, tras desplazar "permanentemente" a sus habitantes, reconstruirá la Franja como la "Riviera de Oriente Próximo".
La visión de Donald Trump de Gaza como una Riviera administrada por Estados Unidos sin palestinos satisface las fantasías de la extrema derecha de Israel, pero también, si se la toma en serio, anuncia una política exterior expansionista, más parecida al pensamiento imperial norteamericano que la era del proislacionismo. Trump incluso ha dicho que estaba dispuesto a enviar soldados estadounidenses sobre el terreno para asegurarse "una posición de propiedad a largo plazo", una idea contraria a la desconexión de Oriente Próximo que ha pregonado hasta ahora. Incluso senadores demócratas le han respondido que sólo lograría la muerte de miles de sus soldados en Gaza y desestabilizar toda la región. El propio Netanyahu parecía contrariado en la rueda de prensa conjunta cuando Trump ha hablado de hacerse el dueño de una Gaza convertida en un terreno de inversión inmobiliaria en lugar de apoyar a los planes de Israel de anexionarse la Franja. Parece, pues, que los únicos que pueden estar de acuerdo con las salidas de tono del presidente republicano es su parroquia de extremistas y sionistas cristianos de Estados Unidos.
Trump ha puesto sobre la mesa una idea tan fuera de lugar que se ha ganado los titulares de todo el mundo, pero sigue sin responder a las dos preguntas clave que Netanyahu también ha querido esconder bajo la alfombra desde que puso en marcha su ofensiva sobre Gaza, que le ha llevado a él y al procesado Humanidad. Si la decisión es expulsar a los palestinos de la Franja, no queda claro dónde irán: Egipto y Jordania ya han rechazado de plano la idea, como hicieron con la administración Biden. La monarquía que gobierna Jordania ha lanzado incluso la inverosímil amenaza que está dispuesta a entrar en guerra contra Israel si ejecuta un desplazamiento masivo, y el régimen del mariscal Al Sisi en Egipto ha dejado muy claro que no quiere ni puede permitirse ser cómplice de una limpieza étnica realojando a los palestinos en la penín. Entonces si no es factible expulsar a los dos millones de palestinos que han sobrevivido a los quince meses de ofensiva israelí, la segunda pregunta es quién debe gobernar a Gaza al día siguiente de la guerra. El alto el fuego que entró en vigor el pasado 19 de enero evidenció que, una masacre indiscriminada no sirvió para hacer desaparecer a Hamás de la ecuación. El "plan" de Trump sirve momentáneamente a Netanyahu para seguir posponiendo la respuesta.
La idea de bombero de Trump no es sólo suya. Su enviado especial a Oriente Próximo, Steve Witkoff, es un inversor inmobiliario de Nueva York sin experiencia diplomática. Todo lo que ha dicho de Gaza es que harán falta cinco años para retirar los escombros y rellenar la red de túneles de Hamás, antes de poder construir masivamente en la Franja para convertirla en un "Nuevo Dubai". Lo lógico es interrogarse sobre sus conocimientos en materia de derecho internacional y también sobre la historia de Gaza y su población, hijos y nietos de quienes fueron expulsados de sus casas con la creación del Estado de Israel y que han sobrevivido a seis guerras y dieciocho años de un bloqueo implacable. La misma gente que ahora ha vuelto masivamente al norte de la Franja saben que no encontrarían ni casas ni hospitales, y mucho menos, agua potable o electricidad.
La oferta de Trump ha sido un regalo para Netanyahu: le quita toda la presión interna y le deja las manos libres para hacer descarrilar el frágil alto el fuego y para seguir apretando a los palestinos de Cisjordania, donde los colonos y el ejército israelí han intensificado sus operaciones de buceo de buceo de las últimas semanas.
Los mandatarios de Europa, China y Rusia no han podido hacer otra cosa que recordarle que Gaza es la tierra de los palestinos y no un pedazo de costa mediterránea donde crear un centro turístico. Incluso su aliado más fiel a la región, Arabia Saudí, que se suponía que Trump quería invitar a normalizar relaciones con Israel, ha tenido que salir al paso recordando que no puede rehabilitar a Tel Aviv sin la creación de un estado palestino. Turquía, aliado de Estados Unidos en la OTAN, también ha puesto el grito en el cielo. Lo mismo han dicho los grandes socios europeos de Israel: Reino Unido, Alemania y Francia. España ha bastado con recordar que Gaza es la tierra de los palestinos.
La segunda fase del alto el fuego
La visión de Trump, si realmente lo expuesto es su plan, es peligrosa por muchas razones. La más inminente es que Hamás puede decidir descolgarse del alto el fuego, porque sabe que cuando haya liberado al último rehén israelí de la Franja, Netanyahu tiene las manos libres para bombardear de nuevo lo que ya ha sido destrozado. Por el momento la reacción de los islamistas palestinos ha sido tachar el plan de "absurdo". El próximo intercambio de rehenes por prisioneros palestinos está previsto para este sábado.
Mientras tanto, han comenzado las conversaciones para la segunda fase del alto el fuego, que ya están en marcha en Qatar. Supuestamente en esta fase debería completarse la retirada de las tropas israelíes hasta el perímetro fronterizo, la liberación de líderes políticos históricos encarcelados en Israel y la salida de los últimos rehenes. Veremos si lo que Trump y Netanyahu han hablado en privado es poner en marcha a rodar el acuerdo que el propio republicano vendió como su primera victoria, el día antes de convertirse por segunda vez en presidente de Estados Unidos.
Las frases de las reacciones
ONU
"Cualquier deportación de un territorio ocupado está prohibida"
El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, reaccionó a la propuesta de Trump recordando que "toda deportación o traslado forzoso de personas desde un territorio ocupado está estrictamente prohibida". "El derecho internacional está muy claro, la autodeterminación es un principio fundamental y debe ser protegido por todos los Estados, como ha subrayado el Tribunal Internacional de Justicia.
Hamás
"Es ridículo y absurdo"
Sami Abu Zuhri, alto cargo de Hamás, ha reaccionado diciendo que las palabras de Trump incitan a "la expulsión de los palestinos de su tierra". "Son ridículas y absurdas; estas ideas pueden inflamar a toda la región: este plan es una receta para el caos porque la gente de Gaza no dejará pasar un plan como éste". El portavoz de Hamás, Abdel Latif al Qanou, ha declarado que "la posición racista americana se alinea con la extrema derecha israelí que quiere desplazar a nuestro pueblo y acabar con nuestra causa".
Autoridad Palestina
"Es una grave violación del derecho internacional"
El presidente palestino Mahmud Abbas, que controla Cisjordania y es el principal rival político de Hamás, ha declarado: "No vamos a permitir ninguna vulneración de derechos de nuestro pueblo, por los que hemos luchado durante décadas y hemos pagado grandes sacrificios". Calificó el plan de Trump de "grave violación del derecho internacional" y defendió la solución de ambos estados, un estado palestino junto a Israel con capital en Jerusalén sobre las fronteras de 1967.
Arabia Saudita
"No habrá normalización"
Aunque Trump ha asegurado que Arabia Saudí –el principal aliado árabe estadounidense– no defiende una tierra para los palestinos, Riad ha dejado claro que no acepta el plan del republicano. El ministerio de Exteriores ha dicho en un comunicado que rechazan cualquier intento de desplazamiento de los palestinos y que esa postura es "clara, explícita y no negociable". "Arabia Saudí reitera su rechazo inequívoco a cualquier vulneración de los derechos legítimos del pueblo palestino, sea a través de las políticas de colonización israelíes, la anexión de tierras palestinas o cualquier intento de desplazar al pueblo palestino de su tierra".
Senadores demócratas
"Trump ha perdido la cordura"
Algunos senadores del partido demócrata han salido a denunciar el plan de Trump. "Ha perdido completamente la cordura –dijo Chris Murphy–. Una invasión estadounidense de Gaza llevaría a la masacre de miles de soldados de Estados Unidos ya décadas de guerra en Oriente Próximo. Es como una broma de mal gusto". El senador Chris Van Hollen también ha sido contundente: "La propuesta de Trump de empujar a dos millones de palestinos fuera de Gaza y asumir su "propiedad" por la fuerza es sencillamente una limpieza étnica con otro nombre". Van Hollen ha advertido también de que las palabras de Trump "darán munición a Irán y otros adversarios para atacar a nuestros socios árabes en la región". Y ha instado al Congreso a "detener este esquema peligroso y temerario".
Rusia
"Rechazamos las políticas de castigo colectivo"
El ministro de Exteriores ruso Sergei Lavrov también ha dejado claro su rechazo al plan de Trump: "Hay planes israelíes para asumir un control total de la Cisjordania ocupada e intentar desplazar a los palestinos de Gaza: Rusia rechaza las políticas de castigo colectivo".
China
"Esperamos un acuerdo político basado en la solución de ambos estados"
El ministerio de Exteriores chino ha dicho que rechaza el desplazamiento forzado de los palestinos de Gaza y ha instado a todas las partes a aprovechar el alto el fuego y el postconflicto en Gaza como una oportunidad para llegar a un acuerdo político sobre la cuestión palestina basado en la solución de ambos estados.
Alemania
"Es inaceptable y una vulneración del derecho internacional"
Incluso Alemania, que ha mantenido un apoyo incondicional en Israel, se ha posicionado en contra del plan de Trump. La ministra de Exteriores Annalena Baerbock ha alertado de que es "inaceptable y una vulneración del derecho internacional" y que llevaría "más sufrimiento y más odio". También ha defendido que no se puede implementar ninguna solución sin contar con los palestinos y que es necesario centrarse en la segunda fase del alto el fuego "porque las vidas de los rehenes están en juego".
Francia
"Nos oponemos a cualquier desplazamiento forzado de los palestinos de Gaza"
El gobierno de Emmanuel Macron también ha salido a la palestra a rechazar el plan de Trump. "Francia reitera su oposición a cualquier desplazamiento forzado de la población palestina de Gaza, que constituiría una seria violación del derecho internacional, un ataque a las legítimas aspiraciones de los palestinos, pero al mismo tiempo un gran obstáculo a la solución de ambos estados y un factor de gran desestabilización de nuestros socios más próximos, Jordania y Egipto. marco de un estado palestino y que no debería estar bajo control de ningún tercer país.
Reino Unido
"Debemos ver dos estados"
El ministro de Exteriores británico David Lammy ha reaccionado desde Kiiv, donde se encuentra de viaje oficial: "Siempre hemos dejado claro que creemos que tenemos que ver a dos estados. Tenemos que ver a los palestinos viviendo y prosperando en su tierra, en Gaza".
España
"Gaza es la tierra de los palestinos"
"Gaza es la tierra de los palestinos gazatinos y deben continuar en Gaza porque es parte del futuro estado palestino por el que España apuesta", ha dicho el ministro de Exteriores José Manuel Albares, uno de los primeros europeos que ha reaccionado en el plan de Trump.
Turquía
"Es inaceptable"
El ministro de Exteriores Hakan Fidan tildó de "inaceptables" las declaraciones de Trump y alertó de que "dejar a los palestinos fuera de la ecuación traerá más conflicto". También se mostró abierto a revertir el boicot a los productos israelíes y la retirada del embajador turco de Israel si se detiene el asesinato de palestinos y mejoran sus condiciones.
Amnistía Internacional
"Sería destruir a los palestinos como pueblo"
Paul O'Brien, director ejecutivo de Amnistía Internacional en Estados Unidos, ha dicho que expulsar a los palestinos de Gaza equivaldría a "destruirlos como pueblo". "Gaza es su hogar. La muerte y la destrucción de Gaza es el resultado del asesinato de miles de civiles palestinos por parte de Israel, a menudo con bombas de fabricación estadounidense".