El análisis de Antoni Bassas: 'Seis horas de viaje por siete horas de trabajo'

Irán lanzó ayer por la tarde 200 misiles sobre Israel. Es el mayor ataque que Irán ha hecho nunca a Israel, y esto se parece cada vez más a una guerra, porque Israel, que ha arrasado a Gaza y ha entrado con sus tropas en Líbano, ha prometido que contestará severamente al ataque iraní. Primera consecuencia económica, el petróleo se ha encarecido.

Ante este panorama en Oriente Próximo, cualquier problema nuestro parece pequeño, pero es nuestro. Déjenme que se lo resuma con la frase que oí en los medios, de una usuaria de Cercanías afectada por el gran corte de servicio en Tarragona, que dijo a los periodistas: “Seis horas de viaje por siete horas de trabajo”. De acuerdo, estamos ante un corte excepcional para realizar obras que deben mejorar el servicio. Pero cuando explicamos que el Estado no invierte en Cataluña o presupuesta pero no ejecuta, el resultado es éste a la larga: que a una trabajadora que lo único que quiere es que los trenes vayan a la hora para llegar a la hora en el trabajo lo que le ofrecen es o comprarse un coche o hacer seis horas de viaje por siete horas de trabajo.

Mientras tanto, en la actividad estrictamente política del día, hoy se reúne en Waterloo el grupo parlamentario de Junts, para preparar el debate de política general de la próxima semana. Puigdemont realizará una intervención en abierto a media mañana. Sobre si Puigdemont será el próximo presidente del partido (que todo el mundo sabe que sí, que lo será), en Junts mismo no es objeto de la reunión de hoy. Junts cree que su programa electoral era suficientemente potente, tienen 15 diputados más que Esquerra y quieren ser alternativa al PSC. En este sentido, Junts debe decidir cómo se pone ante la financiación singular para Catalunya acordada entre PSOE y Esquerra, si tendrá o no los votos de Junts, por lo que Junts espera que el PSOE lo negocie también con ellos.

Por cierto, ayer le preguntaron a la portavoz del Govern, la consellera Paneque, si el presidente Salvador Isla se reuniría con Puigdemont, al igual que se ha visto con Pujol, Montilla o Mas. La respuesta fue:

"Estamos a la espera de que juntos determine quiénes son los interlocutores y hablaremos con quienes determinen". La respuesta no gustó nada a Puigdemont, que espera el mismo trato que Salvador Illa está dando a los demás expresidentes.

De hecho, curiosamente, Salvador Illa y Carles Puigdemont ya han hablado. Investigado presidente, ahora en agosto, Puigdemont llamó a Isla en señal de cortesía institucional. Salvador Illa recibió la llamada con sorpresa y con cortesía también.

Hoy, todo esto se empequeñece ante el titular que abre nuestra edición electrónica a esta hora: “Máxima tensión a la espera de la respuesta de Israel al ataque con misiles de Irán”. En el ARA encontrarán la última hora y la información.

Buenos días.