El análisis de Antoni Bassas: 'El sufrimiento del que habla Isla no es abstracto'
Dejar atrás el sufrimiento es un excelente propósito pero el sufrimiento no es una plaga bíblica inevitable. El sufrimiento tiene responsables. España generó mucho sufrimiento con su respuesta violenta al Proceso
Tanto los presidentes Isla como Sánchez comparecieron ayer para hacer balance, y ambos dijeron que no tendrían inconveniente en reunirse con Puigdemont.
Recuerden que en la entrevista en TV3 el presidente en el exilio lamentó que no sólo no se le haya aplicado la amnistía jurídica, sino que tampoco se le ha aplicado la amnistía política, es decir que Isla la ha desterrado de las reuniones que sí ha mantenido con expresidentes de la Generalitat y Sánchez se hace el adorno cuando acude a Bruselas. Sánchez lo dijo así:
"Este gobierno y el conjunto de la sociedad catalana y española han pasado página de lo que ocurrió en el 2017. La sociedad española no puede mirar atrás, debe mirar adelante. No tengo ningún problema, no sé cuándo me reuniré, pero me reuniré con los líderes de ERC y Junts".
Esta mañana en Junts opinaban que esta disposición a celebrar una reunión que todavía no se ha agendado "es propaganda para intentar evitar la cuestión de confianza".
Sánchez estuvo bien cuando dijo que, de hecho, lo que ya ha amnistiado a Puigdemont es el PP, porque pacta y lo busca para más pactos.
El balance de Isla incorporó otros elementos, como cuando le preguntaron por el sufrimiento de los profesores del instituto de Sant Andreu de la Barca, que se han sentido dejados de la Generalitat:
"Todos queremos que sea una etapa que supere este sufrimiento. Esto no quiere decir que nadie tenga que renunciar a sus ideas. Todo el mundo que piense lo que crea que es mejor para Catalunya y lo defienda dentro del marco de convivencia que tenemos. Pero dejamos atrás episodios que no han sido buenos y que han generado sufrimiento, malestar y frustración. Yo estoy al lado de todo el mundo que haya pasado por estos episodios, de todos".
Dejar atrás el sufrimiento es un excelente propósito pero el sufrimiento no es una plaga bíblica inevitable. El sufrimiento tiene responsables. España generó mucho sufrimiento con su respuesta violenta al Proceso. Los medios y los partidos como Ciutadans, cuando se apuntaron al acoso público de profesores que lo único que habían hecho era hacer bien su trabajo, son los responsables del sufrimiento.
Y terminamos. Supongo que han visto que vuelve Manuel Valls.
Le han nombrado ministro de Ultramar en el nuevo gobierno de François Bayrou. Valls me recuerda aquel Duran Lleida del Polonia que iba por los pasillos diciendo "¡Yo quiero ser ministro!". Valls, el hombre que hizo alcaldesa Ada Colau, lleva escrito en su cara "Yo quiero ser ministro". De lo que sea. ¿De Ultramar? Venga, de Ultramar. Los delPolonia lo clavaron magistralmente el día que Valls regresó a Francia.
Con música llegamos al 24 de diciembre, que no es poco. Que tengan una muy feliz Navidad.