Los virus infantiles que preocupan a los pediatras más que el covid
Los resfriados, las bronquiolitis y las gastroenteritis aumentarán hasta febrero pero ya se está notando en los hospitales
BarcelonaNo han acabado de recuperarse del resfriado y ya pescan una gastroenteritis o les empiezan a salir erupciones cutáneas en la boca, las manos y los pies. Los niños son imanes para los virus y estos se convierten en la pesadilla de todas las familias con criaturas en la guardería o en educación infantil. Desde septiembre, las consultas y las urgencias pediátricas por enfermedades respiratorias y digestivas frecuentes han ido aumentando, tanto en la atención primaria como en los hospitales, después de que en los últimos veinte meses el coronavirus los dejara fuera de juego y, de forma indirecta, protegiera a las criaturas. De hecho, los pediatras aseguran que 2020 fue el mejor año para nacer y el menos medicalizado para los niños, precisamente por la ausencia de virus. "Y ahora vemos una explosión de casos de virus invernales que han vuelto a dar la cara, como el virus sincitial respiratorio (VSR) y los enterovirus", explica Antoni Soriano, de la unidad de Patología Infecciosa Pediátrica del Hospital Vall d'Hebron.
Los pediatras consultados por el ARA confirman que ya se observa un aumento de la carga hospitalaria relacionada con estos virus que casi habían desaparecido, en algunos casos por encima de lo que se esperaba, pero dicen que de momento es una prevalencia muy parecida a las que se producían cuando el covid aún no alteraba el ritmo de los patógenos estacionales. El jefe de pediatría del Hospital Sant Joan de Déu, Juanjo García, explica que la mayoría de pacientes a los que se atienden ahora en el centro sufren algún tipo de bronquiolitis, ya sea causada por el VSR como por el rinovirus, que se comporta como un resfriado común, pero también exacerba los bronquiolos y las crisis asmáticas.
Estos virus han hecho repuntar "significativamente" las hospitalizaciones en los últimos diez días y, a día de hoy, hay una quincena de ingresados con esta condición solo en el Sant Joan de Déu. También se ven ahora más casos de patologías respiratorias causadas por metapneumovirus (que generan cuadros similares a la bronquiolitis), de enterovirus como el de la enfermedad de manos, pies y boca y de diarreas y vómitos provocados por los rotavirus. En cambio, apunta el facultativo, de la gripe todavía no hay rastro.
Todos estos virus son típicos de la época invernal y se transmiten cuando bajan las temperaturas. Pero el año pasado fue una excepción debido al covid y los causantes de la bronquiolitis, por ejemplo, se esparcieron fuera de temporada: en vez de circular entre los meses de noviembre y marzo, empezaron a hacerlo a partir de abril y entre mayo y junio, en verano, y provocaron decenas de hospitalizaciones. "Ahora puede parecer que hay muchos más casos, pero parece que los patógenos respiratorios y digestivos se comportan como cualquier otro año", plantea García. Sin embargo, matiza, todo es muy incierto y no se descarta que pueda haber un primer pico dentro de quince días.
Dos hospitalizados con covid
Esta evolución al alza sí que preocupa a los pediatras porque las urgencias y las unidades de cuidados intensivos (UCI) se suelen llenar de lactantes y niños muy pequeños con estos virus. Nada que ver, aseguran los dos pediatras, con el impacto del coronavirus, que prácticamente no afecta a los pequeños. Soriano explica que la incidencia de covid entre los menores de 12 años (173 casos cada 100.000 habitantes la última semana) es ahora más alta que en algunos grupos de edad adultos (111 casos) porque no están vacunados, pero insiste en que no son cifras comparables a la de los adultos en otras oleadas epidémicas, cuando no estaban inmunizados.
"En cambio, en cuanto a los virus invernales, la incidencia infantil está por encima de lo que sería esperable para esta época del año. Parece que todos los virus vuelven a converger después de un año de parada", resume. En el Valle d'Hebron, por ejemplo, hace más de dos meses que no ingresa ni un solo menor de edad por coronavirus. En todo el ámbito catalán, hay dos niños de 0 a 9 años hospitalizados con covid.
Pero ¿por qué desaparecieron los virus el año pasado? Los expertos creen que hay diferentes factores que han influido en ello, si bien no señalan a ninguno como principal. En concreto, lo atribuyen a la interferencia viral del covid, que no ha permitido al resto de virus tener capacidad para replicarse, así como la generalización de las medidas de protección individual (mascarilla, higiene de manos y distancia social), que han protegido también colectivamente. Admiten que en el curso pasado las guarderías y los centros educativos estaban abiertos y no se usaba mascarilla en niños tan pequeños. "Estos argumentos no pueden explicarlo todo. También podemos pensar que la vigilancia epidemiológica concentraba todos sus esfuerzos en el covid, de forma que quizás se escaparon algunos casos, pero no hay una explicación única", dice Soriano.
Pasar un virus es un proceso natural –y casi obligatorio– para las criaturas, que con cada contagio van desarrollando defensas que fortalecen su sistema inmunitario. Es decir, a medida que se infectan, están más protegidos. Por eso, García plantea la posibilidad de que este año se puedan ver a niños con virus estacionales más graves porque durante su primer año de vida no han estado en contacto con ellos y pueden ser más susceptibles. "Esto no necesariamente tiene que comportar un aumento significativo de la severidad de los casos, pero sí que podrían sufrir síntomas más fuertes", puntualiza.