Ultimátum de Junts y ERC en los gobiernos de Sánchez e Isla
Nogueras exige al PSOE "mover el culo" y Jové reclama al PSC revertir el acuerdo para integrar a la policía en el 112
Madrid / BarcelonaLos gobiernos de Pedro Sánchez y Salvador Illa tienen, al menos, algo en común: ambos dependen de unos socios parlamentarios que aprovecharán las negociaciones para los presupuestos para moverlos en cuestiones clave, como la financiación, el catalán en Europa y el traspaso a la Generalidad de las competencias en inmigración. Juntos lo ha hecho este miércoles en el Congreso con Sánchez después de exigirle que se someta a una cuestión de confianza. Los junteros presionan mientras ponen en duda que se puedan llegar a aprobar unas cuentas para 2025. "No se han puesto en contacto con nosotros para hablar de presupuestos. Dudo de que nos pongan sobre la mesa esta carpeta", ha relatado la portavoz de Juntos en el Congreso, Míriam Nogueras, en una atención a los medios. Del mismo modo, ERC lo ha hecho en el Parlament con el presidente socialista catalán con un tema que ha levantado polvareda en la cámara catalana durante la sesión de control: la integración de la policía española y la Guardia Civil en el sistema de emergencias del 112 .
"Lo que hemos hecho nosotros es lo que nadie más se atreve a hacer, que es exigirles a ustedes que muevan el culo y hagan la trabajo que deben hacer en Cataluña". Nogueras trasladó así el aviso que formuló el lunes Carles Puigdemont en el primer cara a cara con el presidente español tras la petición de los junteros. En la sesión de control en la cámara baja, Nogueras no ha mencionado este examen parlamentario planteado por el líder de Junts. La portavoz juntera ha advertido, sin embargo, que Junts "se planta". "¿Sabe por qué somos exigentes y lo vamos a seguir siendo? Porque el presidente de la Generalitat ha decidido no serlo [...] y porque hay algunos de aquí que para defender bloques ideológicos españoles han renunciado a defender a Catalunya" , ha dicho Nogueras, atacando también a ERC.
El jefe del ejecutivo español ha respondido que "el gobierno de España cumple con sus acuerdos" y alargará la mano "a todos los grupos parlamentarios para alcanzarlos". "Es verdad que tenemos un gobierno en minoría parlamentaria y nos toca negociar, trabajar ley a ley con los distintos grupos de esta cámara, pero insisto en que el gobierno de España cumplirá con los compromisos que son públicos y transparentes, firmados con todos los grupos parlamentarios en mi investidura y en la conformación del gobierno de coalición progresista", ha garantizado Sánchez, quien tampoco ha mencionado la cuestión de confianza, aunque la Moncloa ya va descartar hace dos días. Fuentes del gobierno español reconocen que todavía no han hablado de presupuestos con Junts, pero sí con otros grupos como el PNV. Ahora bien, niegan que los puentes estén rotos porque tienen negociaciones sobre otros asuntos pendientes con los junteros.
"Señora Nogueras, claro que Sánchez no es de fiar. Claro que les ha engañado y les seguirá engañando", ha aprovechado para decir el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que no ha tendido la mano a los junteros como había hecho otras veces. Sin embargo, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, se mostró "absolutamente convencido", en declaraciones antes de entrar en el hemiciclo, que "Juntos hará tarde o temprano presidente Feijóo". "Aquí ya hay una mayoría de derechas, lo que ocurre es que Junts no se atreve a dar el paso, pero se atreverá", vaticinó.
En paralelo, el PNV ha complicado otro de los flancos del presidente español borrandose de la negociación del impuesto a las energéticas que reclama la izquierda, poniendo así en peligro el apoyo de Podemos a las cuentas. Un gravamen que, justamente, quedó fuera de la reforma fiscal por la oposición de Junts.
ERC presiona por el 112
Salvador Illa llegaba este miércoles al Parlament después de que Junts, ERC, los comunes y la CUP cerraran filas para exigirle la comparecencia –la próxima semana– para explicar los acuerdos de la Junta de Seguridad del 5 de diciembre que, entre otros, aplazan la incorporación de los Mossos a la seguridad de puertos y aeropuertos y añaden los cuerpos de seguridad del Estado a la gestión del servicio de emergencias de Catalunya. El presidente no se ha ahorrado los reproches desde la bancada independentista, que considera que el presidente no ha hecho valer a los Mossos como policía integral de Catalunya frente al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Pero ha sido ERC, socio clave para el gobierno socialista, quien ha ido un paso más allá: "Reviertan el despropósito o no cuenten con nosotros", ha dicho este miércoles su líder parlamentario, Josep Maria Jové. Poco después, los republicanos llevaban el torcebrazo a la votación de un decreto ley del Gobierno para mantener el tramo superior del impuesto del patrimonio mientras dure el impuesto a las grandes fortunas estatales que tiene como finalidad que la reptación de este tributo se quede en Catalunya: "No apoyaremos, aunque da continuidad un decreto de ERC", ha anunciado el diputado de 'ERC Albert Salvadó. Es, según los republicanos, un "toque de atención" del que el Gobierno debe tomar nota cara a futuras negociaciones. Por ejemplo, la de presupuestos.
El Gobierno defiende los acuerdos con Marlaska
El ejecutivo catalán ha salido en defensa de los acuerdos cerrados con Marlaska. "Los Mossos son la policía integral de Catalunya, lo tengo claro yo y mi Govern", ha dicho Illa, que aun así se ha abierto a escuchar las propuestas de los grupos para mejorar la implementación del acuerdo. Por su parte, la consellera de Interior, Núria Parlon, ha negado que el Govern haya renunciado a ninguna competencia para los Mossos. "Ha incorporado a la policía y la Guardia Civil al 112 siguiendo los deseos del ministro y encubridor de torturas Grande-Marlaska", se quejó la diputada de la CUP Laia Estrada. Unas palabras sobre el ministro socialista que Isla le ha pedido rectificar, algo que la CUP se ha negado a hacer recordando las condenas del TEDH al exjuez de la Audiencia Nacional.
El acuerdo de la Junta de Seguridad tiene su origen en un acuerdo que se cerró bajo el gobierno de Carles Puigdemont, pero Isla no ha querido poner el dedo en la llaga y, ante las críticas, se ha limitado a decir que da "continuidad" a la labor de gobiernos anteriores. Lo mismo le recordó Parlon al diputado de Junts Josep Rius, que acusó a los socialistas de querer "desintegrar" a los Mossos y renunciar a ejercer todas las competencias desde Catalunya. De hecho, Rius ha negado que la incorporación de la policía en el 112 se impulsara desde el gobierno de Puigdemont: "La integración no se acordó, sólo se puso sobre la mesa como posibilidad a estudiar", ha dicho.