Bruselas retira las vacunas de la cóvid de AstraZeneca a petición de la empresa
La Comisión Europea saca la vacuna del mercado después de que la farmacéutica admita efectos secundarios
BarcelonaBruselas retira del mercado la vacuna de AstraZeneca contra la cóvido a petición de la compañía. La Comisión Europea ha aceptado la demanda de la farmacéutica, que desarrolló la vacuna bautizada con el nombre de Vaxzevria, ya partir de este martes ya no podrá comercializarse en la Unión Europea. “A petición del titular, se retira la autorización de la comercialización de Vaxzevria, que fue concedida el 29 de enero de 2021”, señala el comunicado del ejecutivo comunitario, que no da más información sobre los motivos de una decisión que ya se tomó el 27 de marzo.
En un comunicado, AstraZeneca ha justificado la retirada de su vacuna por "falta de demanda" y por el excedente disponible en estos momentos en el mercado. La compañía añade que "se han desarrollado múltiples vacunas actualizadas" para variantes de la covid que "han provocado una disminución de la demanda" de Vaxzevria. De hecho, "ya no se fabrica ni se suministra", añade el laboratorio. AstraZeneca hizo la petición de retirada el pasado 5 de marzo en Bruselas, pero asegura que sólo en su primer año de uso se salvaron más de 6,5 millones de vidas con más de 3.000 millones de dosis en todo el mundo .
El aval de Bruselas llega días después de que la propia farmacéutica solicitara poner fin a su comercialización y que, en uno de los procesos legales que tiene abiertos en Reino Unido, AstraZeneca reconociera que podía provocar efectos secundarios como la trombosis en casos "muy aislados". La compañía lo admitió en un documento legal presentado ante el Tribunal Superior de Reino Unido en febrero en el marco de un proceso judicial del Tribunal Supremo inglés. De hecho, la compañía tiene abierta una demanda colectiva de 51 personas afectadas y familiares, que reclaman hasta 100 millones de libras por daños y perjuicios por los efectos secundarios de la vacuna.
Ante estos efectos admitidos por la compañía, sin embargo, el director de los Estudios de Ciencias de Salud de la UOC y catedrático de medicina molecular de la Universidad de Leicester, Salvador Macip, envía un mensaje de calma: "Es un efecto secundario que ocurre al cabo de tres semanas de la inoculación de la vacuna. Por tanto, si hace tres años que nos vacunamos, si no ha pasado ya, no pasará", afirma. En este sentido, el experto recuerda que los casos raros de trombosis han pasado en un porcentaje muy bajo y, en cambio, las vacunas han salvado a millones de vidas: "[Las dosis de AstraZeneca] han hecho el trabajo que tenían que hacer ".
La vacuna de Oxford/AstraZeneca fue la tercera en llegar a España, el 6 de febrero de 2021, tras la de Pfizer/BioNTech y la de Moderna. En Europa fue aprobada el 29 de enero del 2021 –el Reino Unido ya lo había autorizado ese diciembre– y ha estado marcada por constantes incumplimientos de distribución y cambios en los criterios de edad por su vinculación con casos raros de trombosis.
Cambios de criterio continuados
De acuerdo con la estrategia de vacunación contra la covid en el Estado, inicialmente Vaxzevria sólo estaba indicada para los trabajadores esenciales, uno de los grupos prioritarios en la inmunización contra el virus, porque estaba prohibido utilizarla entre los mayores de 55 años. Así, poco después de que los abuelos que vivían en residencias y los profesionales sanitarios y sociosanitarios empezaran a recibir las vacunas de Pfizer, los profesionales sanitarios, policías y bomberos, así como docentes y profesores, lo hacían con la de AstraZeneca.
Esta priorización levantó polvareda porque había gente de más de 80 años que no recibía ninguna dosis por los retrasos en la llegada de las vacunas consideradas adecuadas para sus edades, eminentemente Pfizer. Las presiones para conseguir que la vacuna de AstraZeneca se administrara en todas las franjas de edad para disponer de un mayor número de dosis fue muy potente en Cataluña, tanto desde colectivos médicos en la conselleria de Salut, como del mismo departamento liderado entonces por Josep Maria Argimon en el ministerio de Sanidad.
Los cambios en los criterios de edad fueron continuados y en un período muy corto de tiempo. Primero se optó por vacunar a profesionales esenciales y se empezó a utilizar la vacuna para la población general,pero siempre poniendo el límite a los 55 años. Pocas semanas después se empezaron a notificar casos de trombosis en personas vacunadas recientemente con AstraZeneca en distintos países de Europa y los gobiernos empezaron a suspender "temporalmente" las inmunizaciones en cascada.
Cuando la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) concluyó que los trombas pueden ser un efecto secundario en casos "muy raros", recomendó continuar con la vacunación, aduciendo que los beneficios superaban los riesgos, pero varios países modificaron la pauta de vacunación. En el caso de España y Catalunya, las autoridades cambiaron radicalmente de opinión: la campaña de vacunación con AstraZeneca se paralizó en personas jóvenes y sólo se indicó para los mayores de 60 años.