El regalo de Starmer en Trump: más gasto militar a expensas de la ayuda exterior
El 'premier' viaja a Washington el jueves para continuar el esfuerzo de Macron de comprometer a EEUU en un hipotético contingente de paz en Ucrania


LondresRegalo de cumplimiento de Londres en Washington. Con un dramático discurso, recordando la invasión de Ucrania de hace tres años y los riesgos que corre Europa ante la Rusia de Vladimir Putin, Keir Starmer ha comparecido este martes en Downing Street para anunciar que su gobierno subirá la inversión en defensa hasta el 2,5% del PIB de aquí a 2027, y que a finales de 2030, el nivel será del 3%. Starmer abraza así el tradicional "si quieres paz, prepárate para la guerra".
En un contexto de crecimiento cero o casi cero del Reino Unido, de continuo incremento de los precios de la energía, y con la presión de una oposición que combate cualquier intento de subir impuestos, la solución de Starmer para financiar este esfuerzo bélico extraordinario ha sido rebajar el paquete de ayuda exterior. Pasará del 0,5% actual al 0,3% del PIB. La decisión ha sido muy criticada por activistas y entidades que ven en la cooperación con los países en desarrollo otra forma de aportar estabilidad y seguridad a la comunidad internacional, en vez de recurrir al habitual aumento de la partida militar. "Como primer ministro laborista he tomado una decisión que no habría querido tomar. Cortar la ayuda humanitaria para aumentar el gasto militar. Pero luchemos por la paz", enfatizó.
El anuncio de Starmerha tenido lugar 48 horas antes de que se entreviste con Donald Trump en la Casa Blanca. Starmer había comparecido a los Comunes al mediodía, donde reconoció que la nueva inversión en armas y defensa se trata del "mayor aumento sostenido desde la Guerra Fría". El premier ha justificado "una decisión muy difícil" diciendo que "el mundo ha cambiado y se requiere una respuesta generacional". Desde 2027 el país destinará 13.400 millones de libras más al año en el capítulo de seguridad. Y ha querido ayudar a tragar el sapo a los ciudadanos asegurando que todo ello supondrá un nuevo "crecimiento [económico] británico, puestos de trabajo británicos, nuevas habilidades británicas e innovación británica".
Nuevas relaciones con Washington
El primer ministro llegará, pues, a Washington aceptando la política de hechos consumados impuesta por el presidente de Estados Unidos y su cambio de rumbo en relación con la guerra de Ucrania, y ofreciéndole el sacrificio de Londres. La iniciativa se inscribe en la misma representación que este lunes llevó a cabo el presidente francés, Emmanuel Macron, para mostrar el compromiso de Europa con la defensa de Ucrania, pero, sobre todo, también para forzar la mano de Trump a que la hipotética presencia de tropas europeas en Ucrania, una vez firmada la paz, cuente con el apoyo logístico de Estados Unidos. Un soporte que sería fundamental, desde el punto de vista de la protección aérea, por ejemplo. Este lunes, Trump, sin embargo, no se pronunció.
Tras regresar de Washington, Starmer se reunirá este fin de semana en Londres con un grupo de líderes europeos para continuar las discusiones sobre cómo abordar la nueva etapa en la relación transatlántica que ha abierto la presidencia de Trump. En este sentido, Starmer ha asegurado que Reino Unido jugaría su papel en cualquier garantía de seguridad si se llega a la paz.