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El auge de la extrema derecha

"Si fuera por ella, nos cerraría del todo": Ripoll hace balance de los veinte meses de Sílvia Orriols en la alcaldía

Entidades, asociaciones y agrupaciones del pueblo opinan a favor y en contra del mandato de la alcaldesa de extrema derecha

Ripoll esta semana
21/02/2025
4 min
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RipollDespués del fracaso de la moción de censura contra Silvia Orriols, frustrada por la marcha atrás de Junts a última hora, la alcaldesa de extrema derecha continuará al frente del Ayuntamiento de Ripoll, al menos, hasta el 2027. La líder de Aliança Catalana acumula ya veinte meses en el cargo, hacia los dos años de mandato y, durante todo este tiempo de gobierno ha dejado huella en el municipio. Esta semana, el ARA ha recorrido las calles del pueblo, hablando con vecinos de todas las opiniones y consultando a las principales entidades, asociaciones y agrupaciones del pueblo, para trazar una radiografía y hacer balance de estos casi dos años de gobierno ripollés de ultraderecha.

De entrada, resulta evidente que, desde que Orriols es alcaldesa, en la capital ripollesa se cuece una clara polarización entre los defensores más férreos y los que confrontan radicalmente su discurso islamofobic. Ahora bien, más allá de estos dos polos alejadísimos, en Ripoll no todo es blanco o negro, la situación es compleja y llena de matices: a pesar de ser capital de comarca, es un municipio pequeño, de poco más de 10.000 habitantes, donde todo el mundo se conoce, de modo que, a la hora de hablar de política, también entran en juego las relaciones personales, los corazones. Además, en un grueso importante de población se percibe un cierto agotamiento frente al escenario actual, que ha convertido a Ripoll, como pueblo embrión de la extrema derecha independentista, en foco mediático y en un punto estratégico para las direcciones nacionales de los partidos.

Comedor para gente mayor y conflicto con La Metxa

Una de las medidas más aplaudidas del mandato de Silvia Orriols ha sido el impulso del comedor social, donde cada día comen y pasan la tarde una treintena de jubilados: "Es un espacio muy importante, sirve para que los abuelos puedan socializarse y hacen todo tipo de actividades después de comer, están encantados y hay lista de espera". La iniciativa ya existía desde el anterior gobierno municipal, pero Orriols la ha ubicado en una sala con mayor capacidad.

Usuarios del comedor solidario en el que cada día comen y pasan la tarde una treintena de jubilados.

Sin embargo, Orriols también acumula conflictos y polémicas, como con el casal popular La Metxa, que intentó cerrar alegando incumplimientos de licencias y permisos. "Ahora tenemos la actividad muy limitada, pero, si fuera por ella, nos cerraría del todo, porque estamos en la antípoda. Ha utilizado su altavoz para alimentar un racismo muy bestia, por ejemplo, utilizando la cuenta oficial del Ayuntamiento para señalar la nacionalidad marroquí de algunos delincuentes", comenta un miembro de la gestora del casal. 00 euros en multas y tiene varios procesos judiciales abiertos con el consistorio.

La entrada del casal popular La Metxa.

"Se ha normalizado el discurso racista"

Nada más entrar en el gobierno, Orriols también se topó con la comisión de fiestas, que se encarga de organizar la Fiesta Mayor, el Fin de Año o el Carnaval, y dimitió en bloque. Sin embargo, enseguida entró una nueva que, sin posicionarse a favor o en contra de Aliança Catalana, no tuvo inconveniente en entenderse con el nuevo equipo de gobierno. Maria Mas es una de las tres miembros: "Sílvia Orriols nos ha encargado organizar la castañada, que hasta ahora no se hacía. Está muy a favor de promover las fiestas tradicionales catalanas y lo único que nos ha pedido es que nos ceñimos al presupuesto", explica. Más allá de los actos de la comisión de fiestas, Orriols también ha procurado promocionar otras actividades ligadas a la cultura popular, como la Fiesta de la lana y la boda a labrador, el pubillaje, los gigantes o la cabalgata de reyes. Sin embargo, ninguna de estas entidades ha querido valorar públicamente el mandato, ya que representan una pluralidad de opiniones y dependen de las subvenciones municipales. Tampoco quiso opinar la parroquia, la AFA de los centros públicos o el monasterio de Ripoll.

En el ámbito cultural, quien sí que ha querido decir la suya es la librería cooperativa La Lluerna, que también organiza charlas, actos y presentaciones. La gestionan Marta Barceló y Carla Escarrà, ambas muy críticas con la deriva del pueblo, que viven con "preocupación, pesimismo y pena". "Estamos compartiendo municipio con personas que, en vez de trabajar para generar comunidad y entendimiento, buscan todo lo contrario", comenta Escarrà a propósito de la ideología islamofobica de Aliança. Y Barceló concluye: "Se ha normalizado el discurso racista, se han caído las caretas de mucha gente que se ha posicionado de manera muy evidente y no hay contacto entre los dos polos. La alcaldesa, por ejemplo, nunca ha venido a la librería". En este sentido, es sintomático que, justo cuando ganó Orriols las elecciones municipales, preguntando por la calle, costaba encontrar vecinos que reconocieran haber votado a Aliança, mientras que ahora, en cambio, casi dos años después, el partido ya no es un tema tabú, se ha normalizado, mucha gente ha perdido el hedor y opina abiertamente.

Empresarios a favor de reducir la renta garantizada a los inmigrantes

En Ripoll la industria es el principal motor económico y empresarios de este sector, más allá de algunos encontronazos puntuales, no manifiestan quejas sobre el mandato de Orriols, sino al contrario: "Por primera vez hemos logrado que nos bajen el coste de la basura industrial y de los comercios. Se podrían haber escaqueado, pero es de los pocos yal de Empresarios del Ripollès. Pascal también celebra que se haya reforzado la presencia policial en el centro de la villa y, sobre el discurso antiinmigración de la alcaldesa, apunta: "No podemos demonizar al colectivo, si vienen a trabajar y se integran, son bienvenidos, porque necesitamos mano de obra en la industria ripollesa, pero si se les ha acabado la ocupación, prestación de paro, sería mejor que se marchen a otro sitio a buscar trabajo".

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