Ofensiva en Bruselas para evitar otra reducción drástica de los días de pesca
El Gobierno y la Moncloa hacen frente común a la UE para cambiar el reglamento y defender al sector pesquero catalán


BruselasNueva ofensiva en Bruselas para evitar otra rebaja drástica de los días de pesca en los próximos años. La Generalitat, el gobierno español y varios estados miembros más, como Francia e Italia, han propuesto al Consejo de la Unión Europea de Agricultura y Pesca un cambio en el reglamento comunitario porque, de un año para otro, sólo se pueda modificar como máximo un 20% la cifra límite de días de pesca anuales. De esta forma, quieren evitar que la Comisión Europea proponga una reducción como la que planteó para 2025, que deja en 28 —cerca de un 80% menos que en 2024— el tope de días al año que los pescadores del Mediterráneo podían salir en caso de que las embarcaciones no apliquen nuevas medidas de sostenibilidad. "No podemos estar cada año con esta espada de Damocles encima", criticó a la entrada del encuentro ministerial el conseller de Agricultura y Pesca, Òscar Ordeig.
En este sentido, ha explicado que ya hay cofradías catalanas que han desplegado las medidas que les impone la UE, y tienen, por ejemplo, mallas con agujeros más grandes —de 45 milímetros o 50, según el tipo de pesca— para evitar la captura de los peces más pequeños, además de redes con hiperpropulsión para evitar que se arrastren por el suelo y estropeen el fondo marino. Y, en cuanto a las embarcaciones que todavía no cumplen estos requisitos, Ordeig y el ministro de Agricultura y Pesca, Luis Planas, han prometido que subvencionarán el total de la inversión que deba realizar en este sentido el sector pesquero catalán, sea con fondos europeos, estatales o catalanes. A estas alturas, una de las cofradías que menos cumple estas condiciones es la de Deltebre y, en cambio, las de Palamós y Roses son algunas de las que hace años que ya las empezaron a introducir.
Aunque la propuesta la ha lanzado España, también cuenta con el apoyo explícito de los otros dos estados miembros más influyentes del Mediterráneo, Francia e Italia. Y, además, Ordeig ha explicado que hasta una decimocuarta de países -la mayoría mediterráneos- han intervenido en el encuentro ministerial y ven con buenos ojos las demandas españolas. "La respuesta de los estados miembros ha sido muy satisfactoria", celebró.
El consejero y el ministro de Agricultura y Pesca también han reclamado a Bruselas que tenga en cuenta los datos científicos que aporta el Instituto Catalán de Investigación para la Gobernanza del Mar (Icatmar). Critican que los informes realizados por la Comisión Europea aseguran que los ejemplares de especies marinas en la costa catalana han disminuido, mientras que el organismo catalán defiende que la situación de las principales especies pesqueras catalanas se ha ido recuperando y se encuentran en buena situación, según recalcan la Generalitat y el ejecutivo español -
El Govern también ha querido destacar que es la primera vez en casi diez años que un consejero participa en un Consejo de la UE. La última consejera que asistió fue Neus Munté, en junio del 2015, en un encuentro ministerial de Trabajo y políticas Sociales. Según fuentes del ejecutivo socialista, a partir de 2018 la Generalitat habría tenido la oportunidad de participar como representante regional de todas las comunidades autónomas, pero los anteriores gobiernos independentistas lo rechazaron.
"Es importante tener representación allí donde se toman muchas de las decisiones que afectan al sector pesquero y ganadero catalán", ha remarcado Ordeig. De hecho, el consejero de Agricultura y Pesca ha anunciado que crearán "una unidad permanente de pesca" en Bruselas para incrementar la influencia del sector primario catalán en la UE. La formará un representante de Icatmar, uno de las cofradías de pescadores catalanas, uno del sector de agricultura y otro del de la pesca.