La inmigración marca el último frente a frente entre Merz y Scholz antes de las elecciones
La política migratoria es uno de los temas clave que decidirá el voto de los alemanes en las elecciones del domingo

BerlínLa política migratoria sigue siendo uno de los temas principales que decidirá el voto de los alemanes en las elecciones de este domingo. También es un tema que sigue dividiendo, y haciendo chocar, al canciller saliente, al socialdemócrata Olaf Scholz, y al candidato conservador Friedrich Merz, tal y como ha quedado patente la noche de este miércoles en su segundo y último duelo electoral antes de los comicios.
Scholz y Merz, que sale como favorito en las encuestas, han intentado convencer a los alemanes indecisos para que este domingo voten sus respectivos partidos, en un debate electoral organizado por los diarios Welt y Bild. Según una encuesta realizada por el instituto de sondeos de opinión YouGov para la agencia de noticias alemana Deutsche Presse-Agentur (dpa), el 13% de los votantes estudia todavía decidir en los próximos días quién votará. El 7% esperará hasta el día de las elecciones para decantarse por uno u otro partido.
Aunque los socialdemócratas van terceros a los sondeos, por detrás de los conservadores y de la extrema derecha, Scholz se mostró confiado en que una victoria del SPD todavía es posible. De esta forma, su partido no sólo podría estar al frente del futuro gobierno de coalición, sino que se evitaría que haya "la más mínima colaboración" entre los conservadores de la CDU-CSU y el partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), explicó el canciller.
"No pasará ningún milagro en los próximos cuatro días. Su mandato como canciller debería terminar el domingo", ha reaccionado Merz. Los sondeos vaticinan para el SPD de Scholz el peor resultado electoral desde 1887.
El canciller saliente ha defendido la política migratoria y económica de la coalición semáforo, llamada así por los colores de los partidos que lo formaban (socialdemócratas, liberales y verdes) vocaran la convocatoria de elecciones anticipadas.
Romper "un tabú"
Scholz ha acusado a Merz de haber roto durante la campaña electoral "un tabú" al lograr aprobar en el Bundestag, la cámara baja del Parlamento alemán, un plan de cinco puntos para luchar contra la inmigración ilegal, con la ayuda de los votos de la extrema derecha. El candidato conservador reiteró que "no ha habido ninguna colaboración con la AfD y no la habrá". Merz ha recordado que en los últimos tres años, desde que Scholz es canciller, la extrema derecha ha duplicado el apoyo a las encuestas. El candidato de la CDU-CSU lo ha achacado a la política de la coalición semáforo que "con la migración sin resolver y una política económica miserable, ha hecho que este partido se haga tan fuerte".
Scholz, por su parte, ha prometido que no formaría una coalición con Alliance Sahra Wagenknecht (BSW) ni con L'Esquerra para seguir siendo canciller. "No puedo imaginarlo. Son partidos que, por ejemplo, quieren dejar sola a Ucrania", ha recordado el canciller saliente.
"En los próximos cuatro años debemos resolver dos grandes problemas de este país: la migración y la economía", ha recordado Merz a los votantes. El candidato de la CDU-CSU ha asumido el mea culpa de su partido en materia migratoria. Merz criticó la política migratoria del excanciller conservadora, Angela Merkel, sin nombrarla, pero aseguró que su partido "ha corregido ese rumbo". Merkel abrió sus puertas entre 2015 y 2016 a 1,2 millones de refugiados y solicitantes de asilo, la mayoría sirios, lo que ha contribuido, según los expertos, al alza de la extrema derecha en los sondeos.
Los atentados recientes
Tras los atentados recientes de Múnich y Magdeburgo, cometidos por inmigrantes, Merz ha preguntado a Scholz que dónde han quedado las deportaciones "a gran escala" que el canciller prometió hace más de un año.
El candidato conservador considera que Scholz debería haber seguido el ejemplo del gobierno socialdemócrata danés. "Dinamarca ha resuelto en gran medida el problema con una política migratoria muy dura, los populistas de derecha han desaparecido", ha recordado el candidato conservador.
Si hoy se celebraran elecciones en Alemania, los conservadores de la CDU-CSU obtendrían el 29% de los votos; la extrema derecha, el 21%; el Partido Socialdemócrata (SPD), el 16%; Los Verdes, el 13%; La Izquierda, el 7%, y la Alianza Sahra Wagenknecht (BSW), el 5% de soportes. Los liberales del FDP quedarían fuera del Bundestag al no superar el listón del 5% de votos necesarios para obtener un escaño, según el último sondeo publicado.