Hoy hablamos de
Crítica literaria

El libro testimonial de Teresa Ibars que nos hace más sabios

'La muerte del otro' explora las pérdidas de una manera exquisitamente elegante y sentimentalmente imbricada en el territorio

Teresa Ibars
19/02/2025
2 min
Regala este articulo

La muerte del otro Teresa Ibars

  • Comanegra
  • 194 páginas
  • 19,50 euros

De cada autor o autora que nos gusta, siempre amamos un libro por encima de todos los demás. Mi libro favorito deImma Monzón es Un hombre de palabra, donde relata la muerte de su compañero de vida con una excelencia que ya quisieran otros muchos libros. ¿Y qué tiene que ver Monsó con Teresa Ibars (Aitona, 1962), aparte de ser contemporáneas y ambas leridanas? Pues que justamente Ibars acaba de publicar un libro que habla de la muerte de su compañero, Xavier, así como de otros adiós que a lo largo de los años le han desquiciado.

Vivimos en un país donde se habla poco de la muerte, que pasa de salpicaduras a nuestro lado como un hecho prescindible, cuando debería ser nuestra razón de vida: moriremos, ergo aprovechamos la vida. La muerte del otro, en singular, porque el otro son también todos los demás, recuerda desde la herida que han dejado la desaparición de personas cercanas a la autora de forma exquisitamente elegante y, también, sentimentalmente imbricada en el territorio. En los pueblos, las campanas tocan a muertes; en los pueblos, la gente acompaña a los difuntos, propios y ajenos. "Los parientes, a prepararlo todo para velar el cuerpo del finado el tiempo que tocaba. El resto de la gente, y según la proximidad con la familia que sufría la pérdida, a acompañar y rezar; observar y comentar, llorar y compadecer, y, a veces, también criticar".

Aprender a convivir con la muerte

Teresa Ibars nos muestra una relación serena con el inevitable final de todos nosotros. La muerte no le angustia, aunque sea "la pérdida de los seres queridos, de los conocidos o de los desconocidos" la que le ha hecho ver "la cara real y eternamente fija de la muerte". Aprender a convivir con la muerte es también aprender a convivir con el peso de la ausencia, de las ausencias: "La añoranza que brota del recuerdo de los ausentes es un collar pesado de rocas que siempre llevas encima". Ya decía Chateaubriand que es más duro asumir la muerte que sufrirla. Es la añoranza lo que le empuja escribir para preservar la memoria de los recordados. Y también para preservar algo del mundo que desaparece con ellos: "Ahora que la madre casi tampoco está, todo se ha vuelto muy raro. Cada vez más tengo la certeza de que de aquel mío todo no queda nada".

La muerte del otro es un libro hecho con palabras medidas, sin malabarismos literarios ni ganas de deslumbrar. Como una conversación trascendente, pero no pesada, que fluye en un cuarto con luz baja y discretas cortinas que ondean ligeramente con el viento. Al igual que ocurría con Monsó, Ibars nos hace cómplices de cómo los muertos se perpetúan en la vida de los vivos y cómo ella misma se ha ido construir con el recuerdo dejado por aquellos que se fueron. Porque, hechos como estamos de barro dúctil en las manos, nos hacemos con la presencia de los demás, pero también cuando nos faltan. "Esto me ha ido modelando, al igual que mi muerte modelará la vida de los parientes y amigos que se queden sin mí", nos dice la autora en este libro testimonial que ha querido compartir con nosotros. De él salimos más serenos y sabios, porque hablar de la muerte es hablar de la vida.

stats