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Scholz y Merz chocan por la inmigración en el primer cara a cara

El conservador dice que el socialdemócrata está fuera de la realidad y él le reprocha el flirteo con los ultras

Scholz Merz debate
Beatriz Juez
10/02/2025
2 min
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BerlínEl canciller alemán Olaf Scholz se ha enfrentado este domingo, en el primer duelo televisivo, con el candidato conservador Friedrich Merz, que parte como favorito en todas las encuestas, a dos semanas de las elecciones federales del 23 de febrero. Como se esperaba, la inmigración y el coqueteo reciente de Merz con la extrema derecha dominaron el debate electoral, aunque en los 90 minutos cara a cara ambos candidatos también hablaron de economía, energía, defensa, salario mínimo y de la guerra de Ucrania, entre otros temas. Pese a chocar en muchos puntos durante el debate, ambos políticos no han llegado a romper puentes, conscientes de que sus partidos no tendrán más remedio que entenderse después de los comicios si es necesario reeditar la gran coalición.

La campaña electoral alemana se ha visto agitada por las movilizaciones contra la extrema derecha, después del flirteo de Merz con los ultras. La izquierda reprocha a los conservadores que hayan roto el cordón sanitario en la ultraderecha, después de que la CDU-CSU lograra aprobar, en el Bundestag, la cámara baja del Parlamento alemán, una moción para endurecer las medidas en materia de refugiados y asilo, gracias a los votos de Alternativa para Alemania (AfD). Durante el debate, Merz reiteró que "no hay puntos en común" entre su partido y AfD y prometió que en el futuro "no habrá colaboración" con la extrema derecha. Scholz le ha dicho que no se le cree.

Unas 250.000 personas se manifestaron este sábado en Múnich, según la policía, contra cualquier cooperación con la ultraderecha. El pasado fin de semana, las protestas lograron reunir en las calles de Berlín a 160.0000 personas.

El candidato de la CDU-CSU ha intentado presentar al socialdemócrata como un canciller alejado de la realidad, sea sobre la verdadera situación de la economía alemana después de dos años de recesión o sobre las deportaciones de inmigrantes ilegales. "Usted no vive en este mundo", le reprochó el conservador. Merz ha acusado a la coalición semáforo –formada por los socialdemócratas, los verdes y los liberales– de haber hecho "más pobres" a los alemanes con sus políticas económicas. El canciller se defendió diciendo que él no era responsable de la guerra de Ucrania, a la que atribuye la debilidad de la economía alemana: "Yo no invadí Ucrania, yo no corté el suministro de gas; eso lo hizo Putin", se justificó Scholz.

El canciller socialdemócrata ha rechazado el plan del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de expulsar a los palestinos de la Franja de Gaza y tomar el control de ese territorio para convertirlo en una Riviera de Oriente Medio, una idea que ha calificado de escandalosa.

Merz parte como favorito en las encuestas, con un 32% de apoyo, frente al candidato de los Verdes, Robert Habeck, con un 24%. Le siguen Scholz, con un 18%, y la ultraderechista Alice Weidel, con un 13%, según el barómetro de la cadena pública alemana ZDF publicado el viernes. A dos semanas de las elecciones en Alemania, la CDU-CSU obtendría un 30% de los votos, seguido del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD), con el 20%. Los socialdemócratas y los Verdes empatarían al 15%.

Merz quiere tener la coalición de gobierno antes de Semana Santa

El líder conservador Friedrich Merz quiere formar gobierno en el plazo de dos meses, en caso de que el partido gane las elecciones al Bundestag del 23 de febrero. "Espero que la formación del gobierno esté terminada en Semana Santa", dijo el sábado Merz en declaraciones a la prensa alemana. Según las encuestas, lo más probable es que la CDU-CSU tenga que negociar con uno o más partidos para formar un gobierno de coalición, ya que no tendrá votos suficientes para gobernar en solitario. No existe un plazo legal para acabar las negociaciones y habrá que ver con cuál o qué socios gobernarán los conservadores.

El partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD), segundo en las encuestas, quedaría fuera de la ecuación, ya que Merz ha descartado aliarse con los ultras tras el rechazo a la votación de una ley migratoria apoyada por la extrema derecha. El número de socios de la coalición gubernamental dependerá también de cuántos partidos pequeños logren entrar en el Bundestag. Los liberales, la Izquierda y la Alianza Sahra Wagenknecht (BSW) luchan entre sí por superar el umbral del 5% de votos necesario para obtener escaño.

Lo más probable es que la CDU-CSU tenga dos opciones: formar una gran coalición con el Partido Socialdemócrata (SPD) o aliarse con los Verdes para gobernar. Esto último nunca se ha visto hasta ahora a nivel federal. A dos semanas de las elecciones, los socialdemócratas y los Verdes, actualmente socios en el gobierno, luchan por el tercer puesto, detrás de los conservadores y de la ultraderecha.

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