Bocadillo de calamares con mayonesa de estadísticas parciales sobre Madrid

Si París era una fiesta en los años 20, cien años más tarde es Madrid quien ha convertido en señera de su identidad la juerga desenmascarada. Creer que esto no tiene un coste sanitario es ingenuo (o cínico), así que la triple derecha mediática se ha enfundado los trajes blancos de los drugos protagonistas de La naranja mecánica y, armados con bates de béisbol, han salido a apalear unos cuantos datos hasta que queden muy sometidos a su relato. "La mortalidad en Madrid, por debajo de la media con bares y tiendas abiertos", titula en portada el Abc. La primera trampa es obvia: el covid se ensaña sobre todo con la gente mayor, que no son precisamente los que salen de fiesta. Si en vez de mirar muertes, miras contagios, entonces la estadística es mucho más desalentadora: Madrid es la comunidad con más casos por 100.000 habitantes. Y es también la que tiene más ocupación de camas de hospital: un 17,6%.

De hecho, para poder defender su portada, el Abc tiene que hacer un corte muy arbitrario: estudia solo las muertes durante las diez primeras semanas del 2021. Si hubiera hecho la comparativa desde el comienzo de la pandemia, tendría que explicar que Madrid tiene más muertes que la media española. De hecho, representa el 14% de España, aproximadamente, pero acumula el 19,4% de muertes del Estado. En España han perdido la vida 159,6 personas de cada 100.000 habitantes. En el caso de Madrid, la cifra es de 215 personas. Es decir, la mortalidad es un 35% más alta que la media. A partir de aquí, Ayuso puede seguir enarbolando el bocadillo de calamares y la caña, pretendiendo que aquí no pasa nada. Pero las cifras, por poco que se abra la perspectiva, desmontan el relato. "Madrid acumula el 40% de los contagios de España", titulaba La Vanguardia justo el pasado viernes. Pero Ayuso seguirá entonando el "no pares, sigue sigue" mientras los diarios de siempre le seguirán haciendo los coros.