Los comunes ya no se llaman Sumar
La dirección de Catalunya En Comú es partidaria de "reflexionar" sobre el futuro de la plataforma que fundó Díaz
BarcelonaEn el parto de Sumar, hace un año, los comunes asumieron el rol de matrona: impulsaron el liderazgo de Yolanda Díaz y lo defendieron por todos los medios ante los ataques de Podemos; formaron parte de la dirección provisional que condujo al partido hacia su asamblea fundacional, y lograron situar a su ministro, Ernest Urtasun, como portavoz de la formación. Pero los malos resultados en las autonómicas y las europeas han abocado a Sumar a tener que replantearse el rumbo, un trabajo que tendrá que hacer la coordinadora que ha cogido las riendas a raíz de la dimisión de Yolanda Díaz como líder de la formación. Allí ya no hay ningún representante de los comunes, que han prescindido de la palabra Sumar en el nombre del grupo parlamentario en la cámara catalana a pesar de haber concurrido bajo esa marca. ¿Es el fin del idilio entre las dos formaciones?
En público, los comunes no quisieron hacer sangre y se limitaron a dar por buena la decisión de Díaz de plegar, avalando que continúe al frente del ministerio de Trabajo. Ahora bien, fuentes de la ejecutiva consultadas por el ARA admiten que es el momento de "reflexionar" con todos los partidos que forman parte (algunos, como Izquierda Unida y Más Madrid, críticos con su estrategia) para analizar qué no ha funcionado y asegurar la supervivencia de un espacio "de referencia" para las izquierdas plurinacionales a nivel estatal. Estas fuentes niegan que las relaciones se hayan enfriado, pero, ante un Sumar en crisis, sí reivindican su autonomía como "espacio soberano catalán" con un pasado muy anterior en Díaz.
De hecho, pese a ser portavoz de Sumar, no es Urtasun quien lleva las relaciones entre ambos espacios. Ésta es una carpeta en manos de las tres coordinadoras generales del partido: Candela López, Ada Colau y Jéssica Albiach. El otro gran aliado de los comunes dentro de Sumar, Josep Vendrell, también ha perdido peso orgánico dentro del partido: era coordinador ejecutivo y, desde la asamblea de abril, es secretario del modelo territorial y plurinacionalidad.
¿Punto final?
Ahora bien, dentro de los comunes también hay alguna voz que considera que, sin Díaz, es necesario poner "punto final" a Sumar e ir hacia un frente de izquierdas entre partidos liderado por los que sean de alcance estatal; otros, más optimistas, son partidarios de que transite hacia una lógica "federal" que, según admiten, no ha terminado de tener hasta ahora. "Probablemente se ha ido demasiado rápido", reconoce un dirigente de los comunes. Es una de las cuestiones que habrá que abordar en la mesa de partidos convocada por Sumar para analizar su futuro. De entrada, esto supondría que Sumar renunciara a controlar el 70% de la dirección y dejar sólo un 30% en manos de las formaciones que la integran, tal y como planteó inicialmente.
Aún así, el proyecto de reunificación del espacio a la izquierda del PSOE choca con la posición de Podemos, que se opone frontalmente a volver a Sumar después de unos resultados en las europeas que han espoleado al partido lila –sobre todo en Cataluña, donde hicieron el sorpasso a los comunes–. ¿Podrían reconsiderar esa posición? Por ahora, esa posibilidad no está sobre la mesa. "Nosotros estamos completamente enfocados en nuestro fortalecimiento como organización", aseguran al ARA fuentes de Podemos, que confirman que en Catalunya no hay contactos con los comunes para reconstruir puentes.
Mientras tanto, en Cataluña En Comú han puesto en marcha su propio proceso interno para analizar qué ha fallado por haber obtenido malos resultados en las catalanas y en las europeas. Este proceso culminará con una asamblea en noviembre en la que se discutirá qué relación deben mantener con Sumar y Podemos y si renovarán los órganos de dirección, con la incógnita de si las tres coordinadoras repetirán o, incluso, si un cuarto nombre se podría añadir al de las tres actuales coordinadoras generales.