El Estado movilizará 14.100 millones de euros en respuesta a los aranceles de Trump
El gobierno español reorientará partidas económicas que ya están en marcha y aprobará nuevas para proteger a los sectores más afectados por la guerra comercial


MadridEl gobierno español mueve ficha para minimizar los efectos de los nuevos aranceles de Donald Trump sobre la economía española. Este jueves Pedro Sánchez ha anunciado la puesta en marcha de un "plan de respuesta y relanzamiento comercial" a través del que se quiere movilizar hasta 14.100 millones de euros para proteger a las empresas y trabajadores de los sectores más expuestos a la guerra comercial. "Estados Unidos ha decidido atacar de forma unilateral el vínculo [comercial] con un paquete de aranceles sin precedentes. Es volver a un proteccionismo del s. XIX que no es inteligente en un mundo globalizado", ha lamentado el presidente español.
"España contará con un doble paraguas", ha dicho Sánchez durante una intervención en la Moncloa ante empresarios y patronales de esas actividades más sensibles a los nuevos aranceles. El presidente español ha hecho referencia así a las medidas que Bruselas ya está estudiando como respuesta a Trump y que, en palabras de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, serán de "consecuencias inmensas". Asimismo, el gobierno español, pero también Bruselas, hace equilibrios entre anticipar una dura respuesta a Trump y la negociación para reconducir la situación: "Le pedimos a Trump que recapacite y que se siente en la mesa de negociación", expresó Sánchez.
En el cónclave de este jueves se han visto representantes del sector del automóvil, el acero, el aluminio y el agroalimentario, en el que destacan el sector del vino y el aceite. El peso de las exportaciones españolas al país norteamericano fue de 18.904 millones de euros en 2024, lo que supone poco menos de un 5% del total de las ventas de bienes en el exterior. Además de la maquinaria industrial, sobresalen sectores como las semimanufacturas (productos químicos principalmente) y los alimentos, sobre todo aceites y grasas, así como el vino. También es necesario tener en cuenta el componente territorial. País Vasco, por ejemplo, puede verse más afectado por las ventas de maquinaria, mientras que Andalucía o Aragón se verían castigadas por la actividad agraria.
Reorientar partidas existentes
De los 14.100 millones que el ejecutivo central busca movilizar, 7.400 millones son de nueva financiación, mientras que 6.700 millones forman parte de partidas ya existentes. De hecho, algunas de ellas ya estaban pensadas para dar oxígeno a algunos sectores que ahora se ven afectados por los aranceles, como es el caso del plan Moves III (400 millones de euros) de ayudas al coche eléctrico. Otras partidas existentes se reorientarán.
Los pilares en torno a los cuales se organizará este plan de respuesta son dos: uno de protección a las empresas y los trabajadores que puedan verse más afectados por la guerra comercial y otro de reorientación de la capacidad productiva. Esto último supone abrirse a nuevos países –Sánchez se ha referido a aquellos que "respetan los intereses y comparten los valores [de España y Europa]" y, de hecho, el Estado hace tiempo que insiste en reforzar el vínculo con América Latina, aunque también mira hacia Asia–. "La industria del automóvil puede ayudar a otros sectores en los que Europa tiene previsto invertir mucho en los próximos años", ha afirmado el presidente del gobierno español. En países como Alemania este sector ha levantado ya el dedo para virar hacia la defensa.
Sánchez ha asegurado que algunas de las medidas para proteger empresas y trabajadores se pondrán en marcha de forma "inmediata" porque sólo deben reorientarse. Así, por ejemplo, el Estado aprovechará los acuerdos ya establecidos entre el ICO y la banca para poner en marcha dos líneas de avales de 6.000 millones para que las empresas más afectadas tengan acceso rápido a financiación.
En cuanto a las medidas para ayudar a transformar la actividad de algunos sectores, se reorientarán 5.000 millones de euros del Plan de Recuperación, también se destinarán 2.000 millones en seguros de crédito y cobertura al riesgo de exportación, otros 500 millones se destinarán a la reindustrial, se destinarán a la reindustrial.
Contactos permanentes
El gobierno español también establecerá un puente permanente con los agentes sociales, sindicatos y patronales, mientras que el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, será el encargado de coordinarse con las comunidades autónomas y grupos políticos en el Congreso de los Diputados, donde está previsto que comparezca. El titular de Economía convocará una conferencia sectorial con los gobiernos autonómicos para abordar el choque comercial y realizará una ronda de consultas con los partidos políticos.
El tono en el PP ha sido, por ahora, en línea con el del gobierno español. Desde el foro económico Wake up, Spain!, su presidente, Alberto Núñez Feijóo, ha celebrado que el ejecutivo del Estado prepare un plan de respuesta a los aranceles de Trump de la mano de los agentes sociales, si bien ha pedido que se incluya el parecer de las comunidades autónomas (la mayoría gobernadas por el PP).
Con todo, la guerra comercial iniciada por Trump distancia al PP de su socio en la mayoría de comunidades autónomas, Vox, que por boca de su líder, Santiago Abascal, ha acusado a PP y PSOE de "arrastrar" al Estado a una "guerra comercial" con Estados Unidos. "La economía compite en condiciones de desigualdad por la burocracia del bipartidismo", ha dicho Abascal a través de la red social X. Feijóo ha asegurado que "ningún patriota puede defender a quien perjudica los intereses de los ciudadanos" y ha denunciado el "silencio connivente de Vox".
En el ámbito catalán, el presidente Salvador Illa ha anunciado que convocará a los agentes sociales y económicos a la Generalitat este lunes por la mañana para "articular una respuesta" a los aranceles de EEUU.